La liposucción y la coolsculpting están diseñadas para eliminar el exceso de grasa, pero los dos procedimientos varían mucho en el proceso de eliminación de exceso de grasa y el resultado general. Aunque la liposucción y la coolsculpting son una forma segura y efectiva de eliminar grasa y lograr una apariencia más delgada, una podría ser la mejor opción para usted, dependiendo de los resultados deseados y las necesidades individuales.
Liposucción
La liposucción es un procedimiento quirúrgico que aspira el exceso de grasa de debajo de la piel, adelgazando y remodelando ciertas áreas del cuerpo como las caderas, las nalgas y el abdomen. La lipoescultura o lipoescultura también es efectiva para eliminar los depósitos de grasa de la espalda, las piernas, los brazos, la cara y el cuello. El mejor candidato para este procedimiento es alguien que vive un estilo de vida saludable, pero incluso después de los esfuerzos en el ejercicio y una dieta saludable, no puede deshacerse del exceso de grasa en ciertas áreas. La liposucción mejora los contornos del cuerpo y la proporción de una manera dramática, ya que es un procedimiento quirúrgico. El tiempo de recuperación para la liposucción y la lipoescultura depende del alcance del procedimiento. Los resultados durarán mientras continúe viviendo un estilo de vida saludable con una nutrición adecuada y haciendo ejercicio regularmente.
Coolsculpting
Coolsculpting está aprobado por la FDA para la reducción de grasa utilizando una técnica de enfriamiento no invasivo llamada Cryolipolysis para atacar y congelar la grasa localizada. Una vez que las células de grasa tratadas se congelan, mueren y son procesadas y eliminadas naturalmente del cuerpo para siempre. El mejor candidato para esto es alguien que está cerca de su peso corporal ideal, pero tiene pequeñas áreas de bolsillos de grasa obstinada, como en el estómago, mangos de amor o grasa en la espalda que no desaparecerá con la dieta y el ejercicio. Coolsculpting es una solución no quirúrgica que no requiere tiempo de inactividad o recuperación. Puede comenzar a ver resultados tres semanas después de su tratamiento, pero experimentará los resultados completos después de dos meses. Su cuerpo aún expulsará las células grasas y continuará haciéndolo por hasta cuatro a seis meses después del tratamiento.