Es una buena pregunta, y una que todo artista lucha. O puede que te encuentres preguntando:
“¿Alguien va a importar o leer esto?”
“¿Es este el mejor trabajo que puedo hacer?”
“¿Debo ir a tomar un café y un panecillo?”
Como artista, será tu trabajo silenciar esta voz interior de la duda, y es una de las partes más difíciles de ser un profesional. Así que acostúmbrese a ello.
como dice el viejo refrán, “La mitad del trabajo simplemente se está mostrando”