Creo que a menudo cuando extrañamos a alguien hiriente, nos perdemos la fantasía que creamos y luego creímos sobre esa persona.
La mayoría de las veces, la razón por la que seguimos estando con una persona que es cruel, hiriente o egoísta es porque nos hemos enamorado de nuestra versión idealizada y proyectada de esa persona, que, dependiendo de cuán patológica sea la persona, es posible que he querido.
Las personas con trastornos de la personalidad, por ejemplo, reflejarán intencionalmente aspectos de su personalidad y reflejarán sutilmente su lenguaje corporal, las inflexiones de su discurso; efectivamente, te enamoras de una versión proyectada de ti mismo.
Lo que sabes en lo profundo de tu corazón, y la razón por la que duele, es que si esa persona realmente se preocupaba por ti y estaba destinada a estar en tu vida, nunca te tratarían de esta manera. Si realmente fueran la persona que creías que eran, sabes que siempre te tratarían con respeto y amabilidad.
Esa desconexión puede ser atormentadora: ¿cómo podría hacerme eso? (?) Pero la razón por la que haces esa pregunta es porque no estás viendo quién es realmente esa persona. Estás viendo la versión de ellos en la que quieres creer.
Entonces, lo difícil de reconciliar es que ellos nunca fueron lo que pensaron / quisieron creer que eran.
¿El crecimiento emocional siempre es doloroso?
¿Cuál es la razón principal por la que te sientes herido por alguien?
La buena noticia es que cuando puedes enfrentarte a eso, el hecho de que te enamoraste de alguien que fue creado básicamente en tu propia mente, realmente puede liberarte del dolor de extrañarlos; porque tú eres el que creó el amor, la belleza y la magia de ello, por lo que realmente no te estás perdiendo nada . Todavía tiene todas esas cosas dentro de usted, y puede darle esos obsequios en cualquier momento en lugar de despilfarrarlos en alguien que no los haya ganado.
Cuando sienta esas punzadas de anhelo por esa persona, trate de recordarse a sí mismo: las cosas que amaba acerca de esa persona no han desaparecido de su vida. Todavía están dentro de ti, contigo. La persona que te lastimó fue solo el objeto de una hermosa fantasía que construiste.
Puedes dejarlo ir. Puedes construir nuevos sueños. En mi caso, ser consciente de mi tendencia a idealizar a las personas nuevas, a ver solo lo bueno en ellas, a creer de todo corazón en versiones románticas de ellas, me ha ayudado a reconocer cuándo lo estoy haciendo.
A menudo, si pasamos por alto las señales de alarma en el comportamiento de alguien, es porque no encaja con la historia que nos contamos acerca de esa persona.