La aspirina se clasifica como categoría de embarazo D “Evidencia positiva del riesgo fetal humano: el beneficio materno puede superar el riesgo fetal en situaciones graves o que amenazan la vida”. Por lo tanto, la aspirina no se recomienda en embarazos normales.
Sin embargo, hay condiciones para las que se usa aspirina durante el embarazo, como el síndrome antifosfolípido, donde hay una mayor tendencia a producir coágulos de sangre y abortos espontáneos.
Cualquier ingesta de aspirina debe realizarse solo bajo la supervisión de su obstetra, ya que puede dañar al feto.