Existen varios beneficios de la flora intestinal bacteriana, incluidos los beneficios nutricionales y digestivos, la estimulación del desarrollo y la actividad del sistema inmune y la protección contra la colonización e infección por microbios patógenos.
Esto responde a la segunda mitad de su pregunta: sí, puede haber bacterias “malas” en el intestino. El equilibrio entre los dos es extremadamente importante. La mayoría de las bacterias que pueden tener efectos dañinos en su cuerpo no pueden hacerle daño a menos que su sistema inmune y las funciones digestivas estén comprometidas, sin embargo.
