¿Cómo afecta el estrés a la circulación sanguínea y los sistemas digestivos?

Estrés

Es notable cuánta influencia tiene la mente sobre el cuerpo. Podemos hacer que nuestros cuerpos hagan cosas increíbles con fuerza de voluntad; pero, por otro lado, la depresión, el estrés y la ansiedad también pueden tener un impacto bastante negativo en nuestro bienestar fisiológico.

Puede notar que cuando está teniendo un día especialmente estresante, puede desarrollar un dolor de cabeza por tensión, tener dificultades para comer o comer demasiado, o tener un aumento en el ritmo cardíaco o palpitaciones del corazón. Ya sea que quieras o no creerlo, la mente y el cuerpo se entrelazan y se afectan mutuamente de manera significativa (razón por la cual es importante un enfoque holístico de la medicina). A continuación, encontrará cómo el estrés puede penetrar varios sistemas de su cuerpo, haciendo que pierda el equilibrio y empeore su situación. Es por eso que es importante aprender a manejar el estrés.

Muscular

Si alguna vez ha experimentado un dolor de cabeza por tensión junto con dolor en el cuello, usted sabe cuánto estrés puede hacer que sus músculos se contraigan y se tensen. Cuando estamos estresados, nuestra adrenalina aumenta, lo que nos hace más propensos a saltar o estar ansiosos ante el peligro inminente. Esta es la razón por la cual nuestros músculos reaccionan de forma refleja al estrés tensándose, como una forma de protegernos de las lesiones.

Aunque parece que el cuerpo tiene buenas intenciones, los músculos tensos pueden ser muy dolorosos si duran un tiempo. La tensión en los hombros, el cuello y la cabeza puede causar migrañas que solo aumentarán el estrés. Si alguna vez siente que tiene demasiado, puede ser una buena idea invertir en un masaje, dormir lo suficiente, hacer ejercicio y beber mucha agua para ayudar a relajar los músculos.

Cardiovascular

Como se indicó anteriormente, el estrés agudo (períodos de estrés a corto plazo, como los plazos de trabajo) causa un aumento en las hormonas del estrés, conocido como adrenalina, noradrenalina y cortisol. Durante estos momentos, la frecuencia cardíaca aumenta y los vasos sanguíneos se dilatan, lo que aumenta la presión arterial.

El estrés crónico, por su parte, en última instancia, puede causar daños a su sistema cardiovascular. “[Un] estrés constante experimentado durante un período prolongado de tiempo puede contribuir a problemas a largo plazo para el corazón y los vasos sanguíneos”, explica la Asociación Americana de Psicología. “El aumento continuo y constante en la frecuencia cardíaca y los niveles elevados de hormonas del estrés y de presión arterial pueden afectar al cuerpo”. En última instancia, puede provocar hipertensión, palpitaciones cardíacas, ataque cardíaco o accidente cerebrovascular.

Sistema respiratorio

Cuando te sientes estresado o ansioso, las personas a menudo te dicen que te centres en tu respiración. Es por eso que los ejercicios basados ​​en la meditación como el yoga, que combinan el estiramiento y el fortalecimiento de los músculos con una respiración profunda y concentrada, son tan buenos para aliviar el estrés crónico. El efecto del estrés en su sistema respiratorio es especialmente preocupante para las personas que padecen asma o una enfermedad pulmonar, como el enfisema. En algunos casos, el estrés en realidad conduce al desarrollo de asma a lo largo del tiempo. Si te encuentras respirando más rápido de lo normal, también conocido como hiperventilación, debes concentrarte en tomar respiraciones profundas y lentas para evitar un ataque de pánico que podría agravar tus síntomas.

Sistema nervioso

El sistema nervioso es un equilibrio delicado de varias características: existe el sistema nervioso central que incluye la médula espinal y el cerebro, así como la “división periférica” ​​que implica el sistema nervioso autónomo (SNA) y somático. El sistema autónomo, mientras tanto, se divide en el sistema nervioso simpático (SNS) y el sistema nervioso parasimpático (PNS). El SNS es responsable de crear la respuesta de “luchar o huir” durante momentos estresantes, lo que refuerza el cuerpo para luchar contra una amenaza o peligro. Básicamente, el SNS es responsable de hacer que ocurran todos los cambios anteriores en sus diversos sistemas corporales, desde la liberación de hormonas del estrés hasta un aumento del ritmo cardíaco y cambios digestivos. Esta es la razón por la cual el estrés crónico puede ser un drenaje a largo plazo: los constantes altibajos de las respuestas al estrés pueden afectar su cuerpo.

Estómago y digestión

Sí, el estrés también afecta tu sistema digestivo y tus movimientos intestinales. Puede experimentar la sensación nerviosa de mariposas o incluso náuseas. La tensión muscular puede provocar dolor agudo a largo plazo en el abdomen, lo que podría hacer que, en un estado de pánico, se convierta en una úlcera o algo mucho peor. El hecho es que el estrés crónico eventualmente puede causar úlceras; pero también puede causar dolor que se siente como úlceras, uno de esos trucos mentales que alimenta la ansiedad y la hipocondría que debes aprender a evitar.

El estrés también puede afectar los nutrientes que absorbe el tracto digestivo y la velocidad con que se mueven los alimentos a través de su sistema. Según la APA, es posible que tenga problemas con la diarrea o el estreñimiento, según su nivel de estrés.

Entonces, ¿qué podemos tomar de todo esto? El hecho es que el estrés durante un largo período de tiempo realmente puede afectarnos a nosotros y a nuestro sistema inmunológico, lo que a la larga aumenta las probabilidades de enfermar. Encontrar maneras de reducir el estrés y el ejercicio puede salvarle los problemas que el estrés puede provocar.

Fuente: Google