Sí. De hecho, esa es toda la base de la inmunoterapia. Las células cancerosas pueden desarrollar resistencia al ataque inmune de varias maneras, incluyendo
- produciendo citocinas (moléculas de señalización) que inactivan las células T
- Producir otras citocinas que impiden que las células inmunes salgan de los vasos sanguíneos hacia el tumor
- depositar el tejido conectivo como una barrera física contra la entrada de células inmunes
- alterando el número y tipo de antígenos que se muestran en la superficie de la célula
- producir señales que convierten las células inmunes circundantes del modo ‘matar’ al modo ‘proteger’
Identificar y superar estos mecanismos de resistencia es un campo de investigación muy activo en este momento.