Lo que ocurre con el cáncer es que es causado por muchas disfunciones genéticas y epigenéticas debido a la complejidad inimaginable de los sistemas biológicos. No podemos señalar algo tan general como una llaga oral y decir que aumentará las posibilidades de cáncer para un fumador.
Lógicamente hablando, sí, aumenta sus posibilidades de cáncer. Por lo tanto, su mejor opción (si no quiere dejar de fumar) es, al menos, esperar hasta que su dolor se recupere.