Cada junta estatal de farmacia decide estos casos según sus méritos, y cada junta estatal tiene sus propios sesgos y experiencia que determinarán su decisión.
Una condena por DUI no debe ser una prohibición absoluta de una licencia de farmacia a menos que el cargo sea un delito grave (la mayoría no lo es). Suponiendo que su cargo fue un delito menor, la junta de farmacias puede tener dudas sobre si usted es un abusador de sustancias. Obviamente, los farmacéuticos tienen fácil acceso a sustancias controladas, y una persona propensa a abusar de las drogas o el alcohol sería más propensa a traicionar la confianza que se les otorga con una licencia de farmacia.
Podría anticiparse a sus inquietudes mediante la evaluación de un consejero de abuso de sustancias con licencia y que el consejero escriba una referencia para usted que indique que no tiene un problema de abuso de sustancias. Muchas, si no la mayoría, de las situaciones de DUI son errores de juicio cuando no hay un problema crónico de bebida. Si este es el caso, el consejero debería poder presentar la carta que desea.
La junta tendrá las mismas preocupaciones, y probablemente la misma opinión, acerca de otorgarle una licencia de pasante como lo harán con una licencia de farmacia permanente.
En cualquier caso, no intente ocultar la convicción y espere que la junta de farmacias no se entere. Lo harán, y ocultar esa información es una forma casi segura de garantizar que nunca obtendrá una licencia de farmacia.
