Si han pasado por entrenamiento médico, de enfermería o paramédico, absolutamente. Siempre hay algunas “manzanas podridas” como las hay en cualquier ámbito de la vida, pero la gran mayoría mantendrá su información confidencial a menos que se requiera que la revele la ley.
Otros, como naturópatas, quiroprácticos, osteópatas y consejeros no entrenados, practicantes de medicina alternativa de todo tipo, no tanto. La confidencialidad no se enseña formalmente, la ética médicolegal no se enseña en ninguna de estas áreas, ni se puede aplicar formalmente para muchas de ellas ya que, a diferencia de los médicos, enfermeras y paramédicos, no existe un concepto jurídicamente vinculante de confidencialidad.