No hay una única respuesta simple, pero esta es una habilidad que se puede aprender a través de la práctica.
Hay algunos temas generales:
- Colóquese a usted mismo y al paciente correctamente. No deberías dar malas noticias de pie en el pasillo, por ejemplo.
- Inclinarse hacia el paciente No te escondas detrás de un archivo o pantalla.
- Use una sola oración introductoria que exprese el sentimiento: “Me temo que las noticias no son buenas” o algo similar. Esto establece el tono de la discusión y la dirección general, antes de entrar en cuestiones más técnicas.
- Evita la jerga
- Use pausas suficientes para que el paciente pueda pensar e intervenir. No hablar, dejar que las cosas se hundan es importante.
- Reconoce la reacción emocional del paciente. No tiene que usar jerga psiquiátrica elaborada. “Veo que estás muy triste” está bien.
- Concéntrese en las cosas que pueden interesar al paciente. Si el paciente pregunta si podrá hacer X o Y (irse de vacaciones, tener relaciones sexuales, lo que sea), resuelva eso.
- Explícitamente ofrezca discutir temas que le parezcan importantes (por ejemplo, la esperanza de vida) pero no fuerce la información sobre el paciente. Algunos pacientes no quieren saber.
- Evite la tentación de dar falsas esperanzas (“… las noticias son malas, pero …”). No aplaques la esperanza tampoco.
- Pregúntale al paciente antes de informar a la familia.
- Establezca claramente un breve plan de tratamiento. ¿Qué pasa después? Cuándo / quién verá al paciente nuevamente. Por ejemplo, si la noticia es que un paciente no puede ser operado por cáncer, no solo diga “una operación no es posible”. Agregue que “se encontrará con un oncólogo que analizará el tratamiento paliativo”. Si no es posible el tratamiento, indique claramente que se encargará de los síntomas y se protegerá la calidad de vida, por ejemplo.
- Que sea breve. Los pacientes a menudo están en shock y ya no recuerdan los puntos más finos de la discusión.
- Ofrezca una reunión de seguimiento, llamada telefónica. Esto puede ser necesario si necesita discutir los puntos más finos de una estrategia de tratamiento.
Sobre todo, práctica. No evite una situación en la que tenga que dar malas noticias. Pídale a su supervisor que escuche y haga comentarios. Grabar sus entrevistas en video también puede ser útil, si luego puede mostrarlas a alguien competente.