Amo mi piel más porque
* No es sensible, lo que lo hace menos propenso al acné (nunca tuve un solo grano hasta la fecha), alergias y erupciones cutáneas.
* me ayuda a detectar la intensidad de la humedad en el lugar donde resido, lo que a su vez me ayuda a regular el consumo de mi fluido.
* brinda información precisa sobre mi bienestar físico y mental.
* es de bajo mantenimiento, nunca tuvo que ver a un médico y usar todos esos medicamentos / cremas caros (aunque, he invertido en una buena crema hidratante y protector solar).
* brilla a la luz del sol. No, no soy un Cullen 😛 (Esta fue la razón por la que algunos de mis compañeros de clase me llamaron radiactiva).
* Recibo muchos cumplidos.
PD: ¡Gracias mamá y papá por transmitir esos genes e inculcar hábitos alimenticios saludables en mí!