¿Puede un hígado humano ser cosechado fuera del cuerpo humano?

Hay dos formas de mantener el hígado vivo durante el transporte. Una de ellas es la conservación en frío convencional que utiliza una descarga con solución de preservación en frío y la mantiene en hielo. Se puede usar hasta 12 horas después de la adquisición, pero cuanto más corto, mejor. La innovación reciente, aún en la etapa de prueba, es la perfusión normotérmica de la máquina en la que se perfunde con sangre oxigenada a la temperatura corporal. Potencialmente se puede conservar más tiempo de esta manera, tal vez hasta 24 horas, pero no estamos cerca de preservarlo por días.

El término apropiado es preservación y no cosecha. Esto se puede hacer con la antigua técnica de hipotermia, donde se lava la sangre del hígado y se enjuaga el hígado con soluciones frías que contienen sustancias químicas que mantienen estables las células y las nutren hasta que se realiza el trasplante. La otra técnica recientemente popularizada usa perfusión pulmonar a temperatura corporal normal (normotérmica). La perfusión normotérmica puede prolongar el tiempo de conservación en unas pocas horas sobre la perfusión hipotérmica, pero en horas y no días.