El sueño se centra más en la regeneración del cerebro, pero tu cuerpo también se regenera. El sueño es un mecanismo que repone las reservas de energía que su cerebro necesita para funcionar durante el día.
Varias hipótesis se han hecho para explicar esta función restauradora del sueño.
El más antiguo se basa en la reposición de las reservas energéticas . Cada célula necesita energía para funcionar. Esto es particularmente cierto en el caso de las neuronas que, por sí solas, representan el 20% del consumo total de energía de nuestros cuerpos. Esta energía no es libre en el cuerpo sino que es transportada por el enlace químico de una pequeña molécula llamada ATP (trifosfato de adenosina). Cuando es necesario, alimenta las reacciones celulares que consumen energía, se transforma en adenosín difosfato (ADP) y se regenera en ATP mediante la degradación de diferentes moléculas grandes y ricas en energía: creatina en los músculos, glucógeno en el cerebro, etc. Pero esta regeneración es relativamente lenta. Durante el despertar, como la actividad de nuestras células neuronales es intensa, consumen ATP más rápido de lo que puede regenerarse. Poco a poco, a medida que avanza el día, los recursos energéticos disponibles disminuyen. En paralelo, el ADP se acumula en el cerebro y es esta acumulación la que aumenta la necesidad de dormir y nos empuja a acostarnos. ¡Es la señal de que es hora de limpiar los circuitos y repostar!
Fuente y más información – Cómo tu cuerpo se regenera por la noche – Dreem
