Todo es parte del plan.
Llegan los tiempos del fin, cuando el engendro del señor oscuro emerja de grietas recién formadas en la tela del universo, su verdadero propósito será revelado.
Algunos dicen que tienen la llave de nuestra salvación. Los textos de los antiguos Illuminati contienen detalles de experimentos arcanos realizados en los nips masculinos en un intento por descubrir qué hacen y para qué sirven, pero sin resultado, ya que el Señor obró misteriosamente sobre ellos, y los Illuminati se confundieron.
Las historias orales de las remotas tribus de Papúa Nueva Guinea recuerdan una época en que los ritos de iniciación para los jóvenes implicaban un cegamiento ritual, ya que se creía que un elegido profetizado nacería entre ellos que tenían el poder de percibir todas las cosas mediante la aplicación la savia de un árbol sagrado para sus botones de hombre, y como tal no tenía necesidad de ojos.
Algunos estudiosos han planteado la hipótesis de que cuando los planetas están alineados, los pezones masculinos pueden excretar los potentes chorros de una leche fluorescente que tiene el poder de redimir a las almas perdidas, aunque los detalles precisos del pensamiento detrás de esta teoría se han perdido en el tiempo.
Los mitos y leyendas que rodean los pezones masculinos son demasiados para contar aquí, y sus orígenes demasiado vagos y nublados por la controversia para proporcionar una respuesta satisfactoria en cuanto a las verdaderas intenciones de los creadores. Pero, sin embargo, algo algo algo.
Cómo morir y dejar que mi cuerpo viva libremente
¿Qué pasaría con mi cuerpo y mi grasa si solo comiera fruta y solo bebiera agua durante una semana?
Cuando los hombres van sin camisa, ¿cuánto crack debería mostrarse?
El pensamiento moderno dice lo siguiente sobre el tema: “la presencia de pezones en los mamíferos machos es un subproducto arquitectónico genético de los pezones en las hembras” .
¿Realmente podemos creer que esto es todo lo que hay para ellos? En mi opinión, siguen siendo un recordatorio constante de que estamos ciegos ante los verdaderos diseños de los creadores, por lo que todos deberíamos tener mucho miedo de las cosas que no entendemos todo el tiempo.
Un último pensamiento: la próxima vez que te mires en el espejo sin una camisa, mira cuidadosamente tu torso. ¿Ves cómo se ve una cara, con pezones para los ojos y tu ombligo como boca?
Tal vez … Solo tal vez … Esa es la cara de Dios, mirándote fijamente.