Es una reacción humana. Algunas personas toman las cosas de forma demasiado personal. El rechazo es una rebanada en nuestro núcleo, una herida en el ser que nos vemos a nosotros mismos, y es una de las cosas más difíciles de superar.
El fracaso es más fácil de superar cuando te das cuenta de que se deben cometer errores. Así es como aprendemos.