La mayoría de las células vivas necesitan la composición y concentración correctas de nutrientes, oxígeno, vitaminas y otros factores para prosperar. Una vez que se eliminan del cuerpo humano, estos macronutrientes y micronutrientes deben proporcionarse para mantenerlos vivos. Así es como los científicos estudian la arquitectura de los tejidos y órganos. Se llama cultivo de células y tejidos. En el cultivo celular, la mayoría de los tipos de células del cuerpo humano se extraen y luego se cultivan en un entorno artificial con sustratos líquidos que proporcionan todos los ingredientes necesarios para mantener las células felices y divididas.
En ausencia de estos nutrientes suministrados artificialmente, las células están programadas para someterse a la muerte celular. Estas células digieren su propio ADN, destruyen proteínas dentro de las células y forman grandes burbujas de restos celulares muertos. Este proceso se llama apoptosis.