¿Qué es la memoria muscular?

En realidad es memoria kinestésica: está en tu sistema nervioso, no en tus músculos. Si programa, piense de esta manera: si practica un conjunto de movimientos con la suficiente frecuencia, su sistema nervioso lo “compila” en una subrutina para que pueda realizarlo sin pensarlo. De hecho, si empiezas a pensar en ello, puedes volverte loco.

La memoria muscular se ha utilizado como sinónimo de aprendizaje motor, que es una forma de memoria de procedimiento que implica consolidar una tarea motora específica en la memoria mediante la repetición. Cuando se repite un movimiento a lo largo del tiempo, se crea una memoria muscular a largo plazo para esa tarea, que finalmente permite que se realice sin un esfuerzo consciente.

Este proceso disminuye la necesidad de atención y crea la máxima eficiencia dentro del motor y los sistemas de memoria.

Los ejemplos de memoria muscular se encuentran en muchas actividades cotidianas que se vuelven automáticas y mejoran con la práctica, como andar en bicicleta, escribir en un teclado, escribir un PIN, tocar un instrumento musical, practicar artes marciales o incluso bailar.

Es solo la repetición que hace que el músculo tome conciencia de cómo se hacen las cosas hasta cierto punto sin consultar al cerebro.

Si has entrenado antes, entonces te paras por un tiempo. Cuando comienzas a volver a entrenar, ganas músculo más rápido que la primera vez.

La memoria muscular normalmente se refiere a la hipertrofia, en la que si un músculo se reduce de tamaño a través de una actividad reducida, puede recuperar ese tamaño más rápido de lo que inicialmente se tomó.