Esta Q es intrigante. Hice esta misma pregunta cuando ya me iba a mudar a la universidad. Para comenzar, déjame contarte mi historia.
Ingresé a la universidad cuando tenía 16 años. Esto puede sonar increíble y extraño para las personas en los Estados Unidos y otros países, pero lo hice. Tomé Educación como mi programa y me inscribí en los cursos (materias) dados en mi prospecto. Durante ese tiempo, el estudio parecía haberse vuelto más difícil de mi parte. Para ser sincero, no tenía idea de las lecciones que se enseñarían en asignaturas de Educación. Me perdí en algunos de ellos y, en consecuencia, obtuve grados ligeramente inferiores. Sin embargo, como mi especialidad era el inglés, me propuse nunca obtener calificaciones de reprobación en materias de inglés. Los más interesantes para mí fueron: Estructura del inglés, Introducción a la lingüística, Análisis literario, Literatura estadounidense e inglesa e Inglés con fines específicos. Me destaqué mucho en estas áreas, y renové mi noción y perspectiva sobre el estudio. Ese cambio produjo un efecto dominó en otros temas. Más aún, los pensamientos positivos me ayudaron mucho en mi viaje académico. Por lo tanto, aproveché esta filosofía: las cosas pueden parecer duras y difíciles, pero también pasarán como los desafíos que ya supero. Solo tengo que seguir y soportar la dureza.
Unos años más tarde, me gradué con una licenciatura en Educación, especialización en Inglés. Ahora, no compartí esta historia por nada. Solo quiero decir que se trata de lo que quieres terminar y lograr. Si está lo suficientemente determinado para trabajar duro e inteligente en los cursos que le causan problemas, entonces espere resultados positivos al final.
MI RESPUESTA: Estudie cursos que lo desafíen a mejorar, estar motivado. Además, quédate donde aprenderás lecciones para toda la vida que puedes llevar a cabo en la vida.
Espero que esto ayude. 🙂