Sí. Un ejemplo es un tipo llamado células mioepiteliales. De las cuatro categorías básicas de tejido, epitelial, muscular, conectivo y nervioso, se trata de células epiteliales. Sin embargo, son inusualmente contráctiles, como los músculos, y tienen (para el epitelio) niveles inusualmente altos de las mismas proteínas que hacen que los músculos se contraigan: la miosina y la actina. Entonces tienen propiedades de epitelio y músculo, aunque no se consideran células musculares.
Un ejemplo de esto son las células que dilatan tus pupilas (aunque las que constriñen tus pupilas son verdaderos músculos). También hay células mioepiteliales llamadas células ciliadas externas en el oído interno que se contraen para “afinar” tu oído y agudizar tu audición. (A pesar del nombre, no tienen nada que ver con su cabello.) Aquí hay una foto muy bonita de los “pelos” (microvellosidades) en la superficie de una de esas células ciliadas externas.
Otro tipo de célula con propiedades duales son las células neuroendocrinas. Estas son células nerviosas (neuronas) que secretan hormonas. Hay bastantes ejemplos de estos en el cuerpo, pero uno especialmente conocido es dos grupos de neuronas en la base del cerebro (hipotálamo) que secretan hormona antidiurética (= vasopresina) (que actúa sobre los riñones para promover la retención de agua) y oxitocina (que actúa sobre el útero para fortalecer las contracciones del parto y sobre las glándulas mamarias para estimular la liberación de la leche). Las células de la médula suprarrenal que secretan epinefrina y otras hormonas también son neuroendocrinas. Actúan como células de la glándula, aunque estrictamente hablando, son neuronas modificadas del sistema nervioso simpático.
