Lo siento por ti. Una vez trabajé en un edificio que no podía tolerar. Tenía un atrio grande de árboles y plantas en la planta baja y estaba hueco en el interior en el que las oficinas formaban un círculo alrededor del borde interior del edificio. La oficina donde trabajé estaba en el último piso superior. La alta humedad allí hizo que mi presión arterial, que ya era “mala”, subiera después de estar allí por 30 minutos. Podría demostrarlo en una máquina de presión sanguínea.
Encontré otro trabajo en otro lugar.
