Exceptuando los productos “especiales” para el cuidado de la piel, como los exfoliantes o los retinoides (para los cuales debe aclimatarse y usar estrictamente las instrucciones), no existe una manera segura de evitar completamente el acné. De alguna manera, es una apuesta.
Sin embargo, puede disminuir considerablemente sus probabilidades de contraer acné, con los siguientes consejos:
- Verifique los ingredientes de los productos. Mi sitio web favorito es cosdna.com. Ejecute el producto a través del sitio para comprobar si hay ingredientes altamente acnegénicos y trate de evitar esos ingredientes.
- Revisa los ingredientes con cosas que has usado en el pasado que te han causado brotes, o que nunca te han causado ningún problema. Recuerde tomar notas. Tenga cuidado con los ingredientes en cosas que lo rompan; formule hipótesis sobre algunos ingredientes sospechosos y seleccione los probables desencadenantes del acné a través de un proceso de eliminación. Por otro lado, los ingredientes que han existido anteriormente en cosas que nunca te causan ningún problema, en su mayoría están bien.
- Tenga cuidado con las familias de ingredientes. Por ejemplo, si las algas te separan, cosas similares o cosas derivadas de las algas (como el biofermento de algas marinas, el emoliente marino, la astaxantina) también pueden sacarte de quicio. Si la dimeticona lo interrumpe, es recomendable que tenga cuidado con otras siliconas. Si el aceite de coco lo expulsa, tenga cuidado con los triglicéridos capric / caprilyc; y así.
- Para una apuesta más segura, busque productos con una lista de ingredientes más corta y más simple. De esa forma hay menos posibilidades de que algo te saque a relucir.