Algunas de las personas más flexibles son borrachos.
Demasiado borracho para darse cuenta de que un choque es inminente, un borracho a menudo simplemente se sienta en el automóvil y absorbe el impacto como el proverbial saco de patatas, que a menudo sobrevive con heridas leves. La otra parte, que SÍ ve que un accidente no puede evitarse, a menudo involuntariamente se prepara para el impacto y sufre lesiones mucho más graves.
Entonces ser “flexible” hace una gran diferencia. Desafortunadamente, la mayoría de los seres humanos se tensan instintivamente en una situación de estrés, lo que no ayuda cuando se produce un colapso.
