El acné generalmente no se puede curar. La mayoría de la gente simplemente lo supera. Pero puede ser controlado.
El peróxido de benzoilo y el ácido salicílico son los dos más comúnmente utilizados. El peróxido de benzoilo actúa reduciendo la cantidad de bacterias que causan el acné y haciendo que la piel se seque y pele.
El ácido salicílico actúa suavizando la queratina, una proteína que forma parte de la estructura de la piel. Esto ayuda a aflojar la piel escamosa y seca, lo que facilita su extracción. Cuando el ácido salicílico se usa en combinación con otros medicamentos, quita la capa superior de la piel y permite que los medicamentos adicionales penetren más eficazmente.
En el acné, el ácido salicílico ayuda a disminuir el desprendimiento de las células dentro de los folículos, evitando la obstrucción. El ácido salicílico también ayuda a descomponer las espinillas y los puntos blancos.
Hay otros productos químicos que pueden ayudar, pero estos son los dos principales.