Tu piel refleja tu salud. Es el lienzo de tu cuerpo y uno de sus activos más valiosos. Para un buen cuidado de la piel, comience a desarrollar hábitos saludables que protejan su valiosa posesión de las fuerzas externas (e internas). Es la única piel que obtendrás, por lo que tus hábitos diarios lo son todo.
Aquí hay algunos consejos básicos para el cuidado de la piel:
Limpia e hidrata tu piel diariamente. Lávese la cara dos veces al día, una por la mañana y otra por la noche antes de acostarse. Después de limpiar su piel, siga con un tónico y humectante. Los tóners ayudan a eliminar los restos finos de aceite, suciedad y maquillaje que quizás se haya perdido durante la limpieza. La hidratación es necesaria incluso para personas con piel grasa. Compre una crema hidratante que sea más adecuada para su tipo de piel (seca, normal o grasa).
Bloquea el sol Con el tiempo, la exposición a la radiación ultravioleta (UV) del sol causa muchos cambios en la piel, como arrugas, decoloración, pecas o manchas de envejecimiento.
Busque ayuda profesional para problemas de la piel. Tu piel no será perfecta. Puede ser seco u oleoso; puede desarrollar erupciones y acné, entre muchos otros problemas. Aborde el problema con un experto en piel profesional , ya sea un esteticista de la piel en su salón local o un dermatólogo para problemas de la piel más graves.