Hay varios medios para lograr esto. Los buzos libres hacen uso del reflejo mamaliano, que ayuda al corazón a disminuir la velocidad cuando la cara se sumerge en agua fría. Esto se remonta a cuando nuestros antepasados antiguos pasaron sus vidas más allá de la línea de costa buceando por mariscos y crustáceos. La idea es relajar todo el cuerpo y disminuir la velocidad del corazón para reducir la necesidad de oxígeno. Los buceadores aprenden que pueden continuar sintiendo la sensación de aire, lo que duplica su tiempo bajo el agua.
Si estás en tierra, entonces puedes experimentar hiperventilación para eliminar el CO2 del torrente sanguíneo, lo que te ayudará sustancialmente. Tres o cuatro minutos de hiperventilación le permitirán permanecer sin respiración con los pulmones vacíos durante dos o tres minutos. Este método no debe usarse cuando se bucea libremente.