Lo que queda en la conciencia son las impresiones llamadas samskars. Estos son profundos en el subconsciente e influyen en nuestros gustos y disgustos, nuestras habilidades e intereses. Pueden dirigir a una persona en cierta dirección o producir fobias que son difíciles de superar.
Es por eso que algunas personas son muy talentosas en algunas cosas sin gran esfuerzo y otras tienen que luchar para llegar a mediocre. También es la causa o prejuicios y prejuicios. A menudo, dos personas que se conocen antes se vuelven a encontrar y se convierten en los mejores amigos o enemigos implacables.
Estos samskars explican la asombrosa variedad en la naturaleza de las personas, por qué algunos son muy generosos y algunos son malos, algunos son conservadores y algunos liberales, algunos audaces y otros tímidos, etc. Son todas impresiones que se transmiten de una vida a otra, con cada vida agrega o resta algo a la mezcla que es la ‘nueva’ persona.
Cuando alguien sobresale en un campo, puede estar seguro de que han tenido algún interés en ese campo y están retomando el camino que dejaron en una vida anterior. No tengo una referencia, pero he oído decir que se requieren siete tiempos de vida para perfeccionar una habilidad.
Mientras no alcancemos la liberación, estamos cubiertos por el cuerpo denso. En la muerte, el cuerpo sutil, compuesto por la mente, la inteligencia y el ego, se separa de la espiral mortal compuesta por los elementos más burdos y lleva las impresiones y las inclinaciones a otro cuerpo denso. “La entidad viviente en el mundo material lleva sus diferentes concepciones de la vida, ya que el aire lleva aromas. Así toma un tipo de cuerpo, y nuevamente lo abandona para tomar otro”. (Bg. 15.8) Por lo tanto, este renacimiento es como un cambio de vestimenta. Conscientemente, el cuerpo sutil puede olvidar su vida anterior en el sentido de que puede olvidar acciones particulares, pero, no obstante, estas acciones determinan el próximo cuerpo que se está asumiendo. En realidad, las impresiones siempre están ahí, y en algunos casos raros, por la voluntad y gracia de lo Divino, uno puede recordar ciertas acciones de su vida anterior, y los deseos experimentados en esa vida son transportados de cuerpo en cuerpo por la mente, inteligencia y ego
Transmigración del cuerpo sutil de regreso a Dios 1966