¿Qué permite a las amebas extender y mover pseudópodos?

En realidad, aunque este tipo de movimiento puede parecer impulsado por los músculos, el mecanismo es algo completamente diferente, ¡e igualmente fascinante! Como un protozoo, las amebas no tienen músculos. Por el contrario, las unidades estructurales especiales llamadas filamentos de actina, el mismo tipo de unidades estructurales que forman parte del tejido muscular, por cierto, son responsables de la formación de pseudópodos y el movimiento asociado. El proceso es bastante complejo, pero para dar una idea general de cómo funciona, usaré la siguiente ilustración.

En un proceso llamado “polimerización de actina”, los monómeros de actina individuales se unirán temporalmente en estructuras que empujarán la membrana de la célula en una cierta dirección (tipo de bloques de Lego que se unen en una estructura sólida más grande). Los monómeros de actina se unen usando energía de moléculas de ATP (notado como hidrólisis de ATP), los “proveedores de energía” de la célula. La fuerza aplicada sobre la membrana celular a medida que crecen estos filamentos empuja la membrana celular a un seudópodo y puede proporcionar la locomoción celular. En la parte posterior del filamento, los monómeros se separan de la cadena y se reciclan al frente (después de que sus moléculas de ADP asociadas se “recarguen” a las moléculas de ATP) para continuar extendiendo el filamento tanto tiempo como sea necesario.

Esta es una explicación básica del proceso que ocurre con la formación de pseudópodos. Hay muchas otras proteínas y reacciones químicas implicadas, y le animo a que ahonde más en la suya ahora que sabe cómo se llama el proceso. Solo por las patadas, aquí hay un video que muestra la misma polimerización de actina que ocurre dentro de un neutrófilo (un tipo de glóbulo blanco) que está persiguiendo a una bacteria. Como puede ver, ¡en realidad es un proceso bastante rápido! Espero que esto sea informativo.