He donado con gusto varias veces a lo largo de los años, pero esta es mi experiencia con la última vez que doné. Tuvieron una campaña de donación de sangre en mi lugar de trabajo, así que fui a donar obedientemente. Más o menos una semana después recibí un aviso en mi buzón de correo acerca de una carta certificada a la que tuve que firmar en la oficina de correos. Despegué durante mi almuerzo de 30 minutos para ir a la oficina de correos y recoger la carta certificada, que era del banco de sangre local. Aún puedo recordar lo aturdida que estaba de abrirlo y leer que había dado positivo en Hepatitis C, y que debería hacer un seguimiento inmediato con mi médico de atención primaria. Esto fue un viernes, y las oficinas de Dr por aquí cierran al mediodía los viernes, así que tuve que esperar hasta el lunes para conseguir una cita para entrar. Después de un fin de semana de preocupaciones, mi doctor sacó un gran vial de sangre para hacer 3 diferentes pruebas de. Me dijo que ya que no mostraba signos de Hep C, era probable que fuera solo un falso positivo debido al pobre proceso de selección que usaban. Después de que los resultados de esas tres pruebas resultaron negativos, junto con más pruebas 6 y 12 meses después, y varias más en los últimos 25 años, estoy bastante seguro de que fue solo un falso positivo. Así que ahora estoy gastando mucho dinero en visitas al doctor y en el laboratorio, perdiendo tiempo en el trabajo yendo a esas visitas al Dr. Dr, y durante los últimos 25 años he estado en una lista nacional de “no donar” debido a su pobre inicial proceso de selección. No puedo donar sangre para mis hijos, nietos o cualquier otra persona. Solo puedo donar para mí si tengo una próxima cirugía, y si no se usa, será desechada. No hace falta decir que la donación de sangre ahora es un tema muy doloroso para mí.