- Existen normas de OSHA para la exposición al gas anestésico. La mayoría de los quirófanos exceden estos estándares, e incluso los PACU lo hacen de forma intermitente. Si bien esto no demuestra peligro, no quiero vivir en una casa que exceda los estándares del radón, beber agua que exceda los estándares de plomo o exponerme a más radiación de la especificada en un estándar si hay una alternativa.
- Hay varios informes de casos bien documentados de declive cognitivo de inicio temprano entre anestesiólogos con alta exposición.
- Uno de mis colegas que estudia la activación de la enfermedad de Alzheimer por parte de agentes anestésicos me dijo que si bien continúa usando agentes volátiles en la anestesia clínica, no hay forma de que se ofrezca como voluntario para un estudio que involucró la exposición a anestésicos volátiles.
- Los agentes anestésicos volátiles son uno de los mayores contribuyentes a la huella de carbono de los hospitales. No es la intención de la pregunta, pero vale la pena considerarlo.
Traté de obtener el permiso del IRB para observar los cambios en la firmeza postural en los residentes de anestesia que rotaban en el Children’s Hospital, pero fue negado, más debido a la política que a la ciencia. Parafraseando a uno de los grandes filósofos del siglo XX, “la ciencia sale por la puerta cuando el dinero viene a insinuar”
No creo que nadie deba preocuparse por una sola exposición anestésica para un procedimiento médicamente indicado, pero las concentraciones de trazas de respiración a diario no son buenas.