El pH de la sangre controla la capacidad de los glóbulos rojos de retener oxígeno al transformar la forma y la afinidad de la molécula de hemoglobina.
El pH bajo provoca la liberación de oxígeno (formando deoxihemoglobina) mientras que un pH más alto da como resultado una mayor afinidad de la hemoglobina por el oxígeno.
En la enfermedad de células falciformes, la enfermedad de los glóbulos rojos está influenciada por el estado de la hemoglobina. El RBC en forma de hoz puede obstruir arteriolas y capilares que conducen a la muerte del tejido.
La desoxihemoglobina es más probable que cause enfermedad falciforme mientras que la oxihemoglobina tiene menos probabilidades de fallar.
Teóricamente, mantener un pH ligeramente más alto puede reducir las posibilidades de enfermedad en personas con anemia falciforme.
La hiperventilación (respiración rápida dentro y fuera) aumentará temporalmente el pH (alcalosis respiratoria) al expulsar CO2. Sin embargo, los riñones saludables se ajustarán mediante la excreción de bicarbonato (HCO3) de su cuerpo hacia la orina para reducir el pH a niveles normales.