Los lisosomas contienen enzimas digestivas como glicosidasas, proteasas y sulfatasas que se sintetizan en el retículo endoplásmico y luego se mueven al aparato de Golgi. Estas enzimas (que contienen alrededor de cincuenta enzimas degradativas diferentes, descomponen todo tipo de polímeros biológicos, que funcionan básicamente como el sistema digestivo de la célula. Descomponen las cosas que se toman del exterior de la célula y los detritus de la célula.
Si estas enzimas no hicieran su trabajo, el material no degradado se acumularía dentro de los lisosomas, creando circunstancias que permitirían más de treinta enfermedades genéticas diferentes, llamadas “enfermedades de almacenamiento lisosómico”.
