Únete a un club de artes marciales. Karate especialmente viene a la mente. Enseña un movimiento deliberado deliberado y mejora en gran medida el equilibrio corporal general.
Tuve un problema cuando era más joven. El gimnasio y el ejército me solucionaron. Noté el mismo problema desde el principio con mi hijo, que ahora tiene 6 años. Lo llevé a una clase de karate, y le encantó. Sus habilidades motrices y conciencia situacional mejoraron de una manera asombrosa de experimentar. (¡Tengo que alardear un poco de mi chico!)