Los vehículos aéreos no tripulados con fines médicos se pueden utilizar para transportar productos sanguíneos a hospitales de acceso crítico, escenarios de heridos en masa e incluso barcos con pasajeros gravemente heridos. Los aviones también pueden entregar medicamentos costosos y raramente usados, como antiveneno para mordeduras de serpientes, así como ayudar a cumplir la demanda de productos sanguíneos en el entorno prehospitalario de forma rápida y económica.
Una de las aplicaciones / aplicaciones clínicas ya está hecha por The Swedish startup flypulse que ha traído los beneficios del transporte de drones a la medicina, creando drones con desfibriladores automáticos externos (AED) que alcanzan a los pacientes hasta cuatro veces más rápido que una ambulancia.