La ideología que crea y dirige esta sociedad es destructiva y se ve en la mentalidad de la sociedad misma.
Por lo tanto, la bondad se dispensa con moderación, se fomenta solo cuando beneficia a la ideología y se usa como recompensa para aquellos que son efectivos para mantener este sistema destructivo funcionando eficientemente.
El único momento en que esto cambiaría es cuando la bondad es la naturaleza central de la sociedad.
Pregúntese por qué se necesita efectivo cuando todos pueden ver y hacer el bien.
Quizás puedas ver que estás haciendo tu parte para mantener el sistema activo.