Cuando has tenido éxito en alejar a la única persona que significa el mundo para ti debido a tu inseguridad, ¿cómo lidias con el dolor que la acompaña?

No alejaste tu amor simplemente porque eres inseguro, sino porque eso es lo que necesitabas para darte cuenta de que necesitas hacer un cambio en ti mismo.

Para amar de verdad necesitas ser desinteresado. No puede guiar a los que ama a su resultado deseado, debe permitirles seguir su propio camino. Si quieren estar contigo, lo harán. Querer mantenerlos solo los alejará más, porque te aleja de lo que eres, y las personas se enamoran de las personas, no de los seguidores, a menos que sean tiranos.

Solo puedes ser desinteresado si te cuidas primero, si escuchas lo que realmente quieres y necesitas en tu vida. Si te permites escuchar esa voz en lo más profundo, al calmarte y retirarte, te das cuenta de que debes seguir tu propia verdad, y no la de los demás. La inseguridad surge cuando esa parte de ti, la que sabe lo que es mejor para ti, no está segura de adónde te lleva el seguimiento de otra persona. Cuando quieres tanto a alguien que no puedes soportar la idea de perderlo, esa es una pista de que no estás realmente viviendo tu vida, sino que confías en la persona que dices que amas por su identidad y alegría.

Piensa en los momentos en que estabas feliz con tu amor. No eras solo parte de ese momento, eras un testigo, y así es como sabías que eras feliz. El testigo siempre está ahí, el testigo es su habilidad para ver que sus pensamientos y percepciones siempre cambian. Esto significa que, en última instancia, si realmente observas tus pensamientos, puedes llegar a la conclusión de que creaste tus momentos de felicidad y miseria, o al menos permitiste que perduraran en tu mente al enfocarte en ellos en lugar de verlos venir y ve.

Sí, es difícil hacer esto, pero con algo de disciplina podrás lograr la paz y tal vez amar sin pena algún día. Es una enseñanza del budismo, pero también es científica: hay técnicas que puedes usar para desapegarte de las cosas que no estás dispuesto a perder, como la atención plena y la meditación.

Cuando llega ese momento, ves que lo que es tuyo no puede quitarte, porque eres uno con eso y todo lo que hay.

Haz una lista de las cosas que te dan miedo.

Cualquier cosa en esa lista cuyo peor caso te haría herir menos que conducir a la persona que significaba el mundo para ti, entonces ese miedo ya no se debe permitir que exista.

Esfuércese por hacer esto todos los días.

Después de un tiempo, las inseguridades más pequeñas pueden desestabilizar la inseguridad que hizo que alejaras a esa persona. Usa tu nueva fortaleza para poner esa inseguridad en la tumba. Estarás preparado para acercarte a una relación con mucha luz diferente.