Un andador y muletas están diseñados para personas discapacitadas o de edad avanzada que necesitan apoyo adicional para mantener el equilibrio o la estabilidad al caminar. Si bien la mayoría de las personas piensa en ayudas para la movilidad como soporte para caminar, lo más importante es que le permiten levantarse de la cama. La permanencia es beneficiosa para el cuerpo: ayuda a la eficiencia respiratoria, aumenta la producción de anticuerpos que combaten las infecciones, reduce la pérdida de calcio en los huesos y permite que los alimentos pasen por el sistema digestivo de forma más adecuada y fácil que si están confinados a la cama.
El bastidor para caminar se usa para mantener el equilibrio y la estabilidad. Este dispositivo de movilidad estable puede ayudar a pacientes y personas mayores que tienen un déficit de equilibrio significativo. Los mejores caminantes para personas mayores son aquellos que disminuyen con éxito el peso nacido en la extremidad afectada.
Con cuatro patas, el andador ofrece un dispositivo relativamente ligero y estable. Cuando los pacientes pueden aumentar su estado de carga de peso, pueden “graduarse” a un andador con ruedas, que continuará ofreciendo equilibrio y asistencia moderada para soportar peso. Los caminantes exigen la menor coordinación.
Mientras que las muletas son utilizadas principalmente por el paciente para lograr el equilibrio, pero no pueden usarse para soportar peso. Diseñado para disminuir el peso en una extremidad, pero no puede proporcionar una cantidad significativa de fuerza en la parte superior del cuerpo y un equilibrio general a la persona. Su lesión, condición física y edad pueden dictar qué tipo de muleta se prescribe. Es por eso que la mayoría de los hogares de ancianos utiliza andadores de muletas.