Es un lazo entre el ácido y la ketamina para mí.
El ácido tiene una gran variabilidad en sus efectos, nunca puedo predecir cómo irá un viaje, y dura mucho tiempo. Lo cual puede ser bueno a veces pero no tan bueno otras veces. En el lado positivo, a veces la euforia y el one-with-the-world-ness es indescriptible y potencialmente alterador de la vida. Lo negativo es que a menudo tengo calambres estomacales terribles y una sensación de picazón como si estuviese cubierto de pequeños insectos, pero esto no siempre ocurre y no suele ser grave.
La ketamina es de acción mucho más corta (alrededor de una relación de duración de 6: 1 para los dos) pero puede ser similarmente intensa. Una dosis baja no será una gran experiencia psicodélica, sino que puede producir un zumbido social o energético. Una dosis alta te impedirá moverte mucho, pero las imágenes son realmente sorprendentes a medida que te vuelves parte de un nuevo mundo aparentemente bidimensional, cerrando los ojos y volando alrededor del destino que tu mente desee.
En cuanto a los dos mixtos, son altamente sinérgicos y no una combinación que debe tomarse a la ligera. Respete las sustancias y empiece lentamente, y podrían sacudir su mundo.