El Dr. Rese está en lo correcto en sus explicaciones. Hay otros dos factores de importancia biológica a considerar. En primer lugar, debido a varios procesos documentados por los geólogos, sabemos que la atmósfera tenía una cantidad menor de ozono de la que tiene ahora. La radiación solar, especialmente la luz ultravioleta, golpearía la Tierra en cantidades mucho mayores de lo que ocurre ahora. La radiación ultravioleta puede ser mortal a niveles no mucho mayores que los que obtenemos ahora. Incluso en el nivel “bajo” de hoy en día, los rayos UV todavía provocan cataratas y cáncer de piel con frecuencia.
En segundo lugar, los niveles de dióxido de carbono eran más altos que hoy. Junto con una atmósfera más delgada, aumento de la radiación solar y un importante gas de efecto invernadero, la Tierra era mucho más cálida en aquel entonces. Piensa en el lugar más cálido de la Tierra que conoces; ahora imagina que ESO fue uno de los lugares más fríos durante el Jurásico.
¿Podrías sobrevivir? Quizás, pero no apostaría por una vida muy larga.