En el Reino Unido, existe una correlación entre el nivel de escolaridad y la clase social. La clase social es un factor de disuasión en muchas enfermedades y tiene una relación con la esperanza de vida. Además, la clase social y la ocupación están relacionadas con factores que afectan la salud: el tabaquismo, el consumo de alcohol y los niveles de ejercicio son algunos de ellos.
La ocupación es importante por varias razones. Algunas ocupaciones se asocian con un mayor riesgo de salud perjudicial debido a la exposición a sustancias nocivas; por ejemplo, los mineros del carbón tienen un mayor riesgo de trastornos respiratorios, los agricultores corren mayor riesgo debido a la exposición a sustancias químicas nocivas (organofosforados, etc.)
La ocupación también es un factor a la hora de decidir sobre estrategias de tratamiento. Un jugador de fútbol profesional puede requerir una intervención quirúrgica para una lesión cuando un empleado de oficina no lo haga.