Para responder a su pregunta, pensé en una historia escrita en Internet escrita por un autor del que no conozco la identidad, pero la historia es la siguiente:
Una maestra les dio a sus alumnos una tarea pidiéndoles que enumeraran lo que pensaban que eran las presentes “Siete maravillas del mundo”. Hubo algunos desacuerdos, pero los resultados de la mayoría fueron bastante predecibles: las Grandes Pirámides de Egipto, el Gran Cañón, la Gran Muralla de China, etc.
Mientras reunía los votos, la maestra notó a un alumno que aún no había terminado con su trabajo. Ella le preguntó a la niña si estaba teniendo problemas.
La niña respondió: “Sí, no podía decidir porque había tantas. La maestra dijo:” Díganos lo que tiene y quizás podamos ayudarlo “.
La niña titubeó y luego leyó: “Creo que las Siete Maravillas del Mundo son, ver, oír, tocar, saborear, oler, reír y amar”.
Ahora bien, si esa historia corta te tocó de una manera profunda, entonces acabas de experimentar la presencia de tu propia alma.