¿Alguna vez elegirías a un médico con una excelente “actitud de cabecera” sobre uno que supiera ‘sus cosas’?
La respuesta es no. Cuando ingresé a la práctica por primera vez, el hospital al que admití mis pacientes tenía 2 cirujanos generales en el personal. Una era una persona razonable pero con, a veces, un enfoque brusco…