El dinero como único motivador se vuelve peligroso cuando no se tienen en cuenta otros factores sobre el trabajo. Por ejemplo:
- ¿Este trabajo lo califica para hacer o es capaz de realizar con entrenamiento?
- Incluso si no es el trabajo de tus sueños, ¿encontrarás el trabajo lo suficientemente desafiante como para mantenerte activo y tener un buen desempeño?
- ¿Crees que podrás manejar el trabajo con ese supervisor y esos compañeros de trabajo sin que esto agregue demasiado estrés a tu vida?
- ¿Puede trabajar para esta empresa u organización en particular sin sentir que su empleo está en conflicto con sus valores, creencias, religión o objetivos de vida?
En otras palabras, como mínimo, elija un trabajo en el que sepa que puede hacer una cantidad honesta de trabajo por el salario que ofrecen, y solo trabaje en entornos que no pongan en peligro su moralidad o le hagan temer ir cada día (ya sea porque odias a la gente o el trabajo te aburre a la muerte).
Por cierto, otra cosa a considerar es si está asumiendo un compromiso a corto o largo plazo para un trabajo. Si se le ofrece una posición de mucho dinero sin la expectativa de que la mantendrá durante muchos años, no es irrazonable trabajar en un lugar durante uno o dos años y usar eso como una forma de acumular sus recursos financieros para que más adelante tener la libertad de perseguir objetivos diferentes en el futuro, como comenzar su propio negocio o trabajar para un trabajo de baja paga y alta satisfacción.