En primer lugar, debe ser diagnosticado con una enfermedad mental donde un ESA sería un contribuyente definitivo para su recuperación. Estos suelen ser, entre otros, problemas relacionados con la ansiedad, depresión clínica o trastorno de estrés postraumático. Si ya está recibiendo tratamiento para estos problemas, ya está en una buena posición para encontrar un médico o terapeuta que le recete un ESA. Si no es así, pero siente que podría beneficiarse de un tratamiento médico, le recomendamos encarecidamente que hable con su médico o terapeuta.
Una vez que se ha establecido que usted necesita un plan de tratamiento de salud mental, puede pedirle a su médico de familia que lo remita a un profesional de salud mental con licencia. Tras referirlo, dígale a su terapeuta, psicólogo o psiquiatra que usted siente que un Animal de Apoyo Emocional lo beneficiaría enormemente y posiblemente aceleraría su recuperación. Si ellos creen que esto es cierto, entonces le recetarán un ESA como parte de su plan de tratamiento y le escribirán una carta de ESA.
Si no tiene acceso a un terapeuta, también puede ser evaluado en línea para una carta de ESA.