¿Podrían las bombas / motores implantarse quirúrgicamente en los principales vasos sanguíneos después de la insuficiencia cardíaca para mantener la vida?

La teoría suena bien, pero tendría su propio conjunto de problemas, al menos uno de los cuales es que el cuerpo intentará atacar el dispositivo a través de la respuesta inmune, que cae en cascada en un conjunto distinto de problemas bioquímicos en sí mismo. Otro problema potencial es que debemos tener una forma de evitar que se formen coágulos de sangre en el dispositivo, lo que puede causar una TVP o desalojarlo y causar una embolia y, por lo tanto, causar un ataque cardíaco, accidente cerebrovascular o EP. (lo cual es difícil de hacer: con las válvulas cardíacas artificiales, este sigue siendo un problema importante que requiere el uso de anticoagulantes que conllevan el riesgo de hemorragia interna). Otro efecto desagradable de la insuficiencia cardíaca es que tiende a causar gradientes de presión más altos en el pulmones, y lo que llamamos hipertensión pulmonar. Los gradientes de presión generados por el músculo cardíaco NO son iguales en ambos ventrículos, ya que la presión sanguínea normal es significativamente más baja en los pulmones que en otros lugares. Por lo tanto, la bomba debería ser capaz de hacer coincidir los gradientes de presión correctos en los lugares adecuados para que funcionen de manera efectiva. Otro problema más sería el efecto de estas “bombas” en el ritmo del corazón. Tenemos el problema de cómo el dispositivo afectará NSR.