De vuelta en el día (como hace 12 años) tenía 18 años y vivía en una casa de fiestas. Mis compañeros de habitación y yo no éramos traficantes de drogas, pero participamos en el consumo de cannabis y ocasionalmente en otras sustancias ilegales. Nunca vendimos drogas, pero sí a personas que visitaban aleays, a nuestros tatuajes y al punk rock, escuchamos en voz alta que nuestros vecinos de al lado pensaban que éramos traficantes de drogas.
Lo que los vecinos hicieron una vez fue que el esposo viniera a nuestra casa con una gran historia sobre cómo estaba estresado, su esposa misteriosamente se había ido y sobre él solo necesitaba relajarse. Le preguntó a mi compañero de cuarto si tenía algún bote que pudiera comprar para ayudarlo a relajarse; nadie en nuestra casa vendía marihuana, pero se sentía mal por el chico. Mi compañero de cuarto vendió al vecino un montón de hierba ($ 20) de su escondite personal. El vecino dijo gracias, actuó muy aliviado y fumó un porro con nosotros. Al día siguiente, el vecino deja una carta en nuestro buzón que dice que ahora tienen pruebas de que éramos traficantes de drogas y que le dirían a nuestro arrendador (que también era propietario) si no les pagamos una parte de nuestras ganancias. Nosotros no somos traficantes de drogas, no sacamos provecho de las ventas de drogas, y nos enojamos porque el vecino hizo una estupidez como esa, le dijo al vecino que se fuera a la mierda y en rebelión lanzó una fiesta gigante esa noche (estoy hablando de 60 personas, fuegos artificiales apagándose toda la noche, y la fiesta duró hasta las 4 o 5 de la mañana).
Un par de semanas después, cuando era el momento de pagar el alquiler, llamaron a nuestro arrendador alegando que tenía pruebas de que somos traficantes de drogas y que él también intenta chantajearnos duplicando nuestra renta. Sus palabras “tus drogas vendedoras, puedes pagarme más, QUIERO MI CORTE”.
Entonces podrías chantajear a tus vecinos como mis vecinos nos lo hicieron a mí y a mis amigos.
Nota: si son traficantes de drogas en tiempo real, no pueden recibir amenazas de chantaje tan a la ligera. (Solía conocer a un traficante de drogas que si se detenía inesperadamente le contestaba la puerta con un rifle de asalto apuntando hacia usted … sí, esto es en los Estados Unidos)