Podría ayudar con el dolor físico que está experimentando por el síndrome de abstinencia, sin embargo, es posible que se vuelva adicto a los analgésicos.
Tal vez pruebe ibuprofeno con regularidad, trate de comer bien, manténgase hidratado e intente salir y moverse, incluso si es doloroso. Permanecer en cama por períodos prolongados de tiempo probablemente hará que su cuerpo se sienta aún peor.