Dependiendo del grado de extensión de la hendidura, se planifica el momento de la cirugía.
En general, el labio leporino se puede reparar fácilmente dentro de unas semanas después del nacimiento siguiendo la regla de Millard de 10 (10 SEMANAS DE EDAD, 10 LIBRAS DE PESO, 10 GRAMOS DE Hb)
Pero dado que la atención operativa neonatal postoperatoria es muy frágil y crítica a una edad tan temprana tan a menudo, el niño es monitoreado cuidadosamente durante 4 a 5 meses antes de que se desarrolle un plan quirúrgico adecuado.
Lo más importante es que, dado que se trata de una edad en desarrollo, varios cambios orofaciales permitirán que el cirujano desarrolle una estructura ósea ligeramente mejor y más fuerte.
El período de espera de 6 meses es, de hecho, una mejor opción que la reparación inmediata.