Nos referimos al gas O₂ como ‘oxígeno’ y no ‘dioxígeno’ por la misma razón por la que decimos ‘un perro’ y no ‘un perro de cuatro patas’ .
Sería sobrecomunicar una información inútil una y otra vez, cuando no surge la ambigüedad al no hacerlo.
En caso de que Ozon, O₃ , no haya adquirido un nombre diferente, podría haber casos en los que tengamos que recalcar qué oxígeno estamos mencionando.
Aún así, como O₃ es una forma rara (bajo condiciones diarias) de oxígeno, de nuevo no surgiría ambigüedad al decir ‘oxígeno’ para O₂ y especificar ‘oxígeno triatómico’ según sea necesario.